Me encanta la estética vintage, esa referencia al pasado a través de las prendas y objetos que fueron diseñados en la época a la que pertenece su estilo. Me encantan sobre todo la fotografía de inspiración vintage y la elegancia que desprenden. Pero debemos diferenciar lo que es vintage de lo retro.
El vintage son prendas que se diseñaron y se fabricaron en los años 40, 50, 60 hasta los 70, lo importante es que la prenda tenga ese toque añejo de épocas anteriores. Las prendas vintage que puedes encontrar son faldas estampadas, vestidos ceñidos a la cintura o short de talle alto. Para tener un verdadero look vintage no vale ir al baúl de los recuerdos y vestirse con cualquier cosa, el verdadero estilo vintage es mezclar prendas del pasado con prendas actuales, yo te aconsejo que solo llevéis una sola prenda vintage y el resto actual.
Si te gusta este estilo pero opinas que es demasiado llamativo para ti, puedes optar por los complementos y accesorios, hay una gran variedad y además puedes recurrir al armario de tu madre o abuela. Un bolso antiguo, unas gafas, joyas o bisutería antigua.
Si no te apetece llevar nada usado, ni buscar en mercadillos y tiendas de segunda mano pero, te gusta esta estética, tienes la inspiración vintage que son prendas actuales inspiradas en tendencias de décadas anteriores.
Por otro lado tenemos el retro. Entendemos como retro, prendas y objetos que evocanal pasado, pero que no pertenecen a él, empleando una estética adaptada a las necesidades actuales. Últimamente vemos mucho este estilo en decoración, objetos y muebles que estuvieron de moda en otros tiempos y que combinan con los actuales a la perfección, creando ambientes muy agradables.
Tanto el vintage como el retro son estilos ideales para decorar la casa de forma diferente y con bajo presupuesto, podemos encontrar objetos en tiendas de segunda mano o incluso a través de familiares. Podemos encontrar colchas, butacas, cuadros antiguos, jarrones, lámparas, alfombras… Ten en cuenta que al igual que la ropa debes combinarlo con cierta gracia y mezclar distintos estilos utilizando objetos actuales con los de épocas anteriores. Estos estilos los tenemos que diferenciar del estilo Shabby chic, que es una decoración desaliñada con un toque chic, siempre en tonos blancos y utilizando accesorios nuevos con aspecto de antiguos como, viejos espejos o lámparas de araña. Estilos totalmente contrarios al industrial, clásico, minimalista, rustico, el oriental y el kitsch, a estos estilos le dedicaremos otro artículo.
Si te gusta este estilo, busca en los baúles de las abuelas que seguro que encuentras algo que te encaja, bien para tu vestuario, bien para decoración. Y si tu abuela o tu madre no son de las que guardan las cosas, no te preocupes hay prendas actuales inspiradas en tendencias de décadas antiguas.
La Clave: ¿Te apuntas a la estética vintage?